EAG une fuerzas con empresas líderes de la industria nuclear española para defender la continuidad de las centrales nucleares.

EAG (Empresarios Agrupados – GHESA) se une a los líderes de la industria nuclear española para defender la continuidad de las centrales nucleares, destacando su papel en la seguridad energética, la estabilidad económica y la sostenibilidad. En un manifiesto conjunto, se insta a revisar el acuerdo de 2019 que prevé su cierre gradual, señalando las repercusiones económicas y sociales, incluyendo la posible pérdida de 20.000 empleos altamente cualificados. Javier Perea, Consejero Delegado de EAG, subraya que estas plantas operan de forma segura y eficiente, aportando energía baja en carbono. La energía nuclear, reconocida por el OIEA y la Comisión Europea, es clave para la descarbonización y la seguridad energética. EAG aboga por una política basada en criterios técnicos y económicos que garantice un futuro energético sostenible para España.

En este documento firmado por EAG (Empresarios Agrupados-GHESA), Framatome, GDES, GE Vernova, IDOM y Westinghouse, y al que se han adherido más empresas del sector, reflejan su «preocupación por el impacto del sector en la competitividad industrial y el bienestar de la sociedad. Por ello, comprometidas con la seguridad, la estabilidad del suministro eléctrico y la descarbonización de la economía, manifestamos lo siguiente»:

DIÁLOGO Y RENEGOCIACIÓN DEL PACTO DE 2019

Instamos a la apertura de un diálogo y a la renegociación del acuerdo de 2019 sobre el cierre escalonado de las centrales nucleares. Dicho acuerdo se adoptó en un contexto industrial, geopolítico, social y económico completamente distinto al actual. No podemos someter a nuestro tejido productivo a una merma de su competitividad por el hecho de tomar la decisión de cerrar las centrales nucleares a partir del 2027, empezando con la central nuclear de Almaraz, sin antes asegurar una alternativa viable con todas las fuentes de energía no emisoras de CO₂.

RECHAZO AL IMPACTO ECONÓMICO Y DE COMPETITIVIDAD DE LAS REGIONES AFECTADAS

La industria auxiliar de soporte al sector nuclear genera cerca de 20.000 puestos de trabajo estables y altamente cualificados e incluye empresas de ingeniería, fabricación de componentes y servicios de apoyo. El desmantelamiento prematuro de estas infraestructuras supondría un golpe económico y social irreparable para las regiones donde operan, afectando también a la competitividad de la industria nacional y debilitando el tejido productivo vinculado a la energía.

LLAMADA A LA REVISIÓN DE LA POLÍTICA ENERGÉTICA

Instamos al Gobierno de España y a las autoridades competentes una revisión del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, incorporando las medidas necesarias para garantizar la continuidad de la energía nuclear. Esta fuente debe ser reconocida como fiable, eficiente y competitiva, con bajas emisiones de carbono, y recibir un trato justo para incentivar la inversión, según el Foro Económico Mundial. Tanto la Agencia Internacional de la Energía (AIE) como la Comisión Europea han destacado el papel clave de la energía nuclear en la descarbonización y la seguridad del suministro energético. Instamos a una política energética basada en criterios técnicos y económicos, alineada con las prácticas internacionales que valoran la energía nuclear como esencial para la transición ecológica. No debemos dejar de observar la evolución de estas políticas en el actual contexto internacional. Otros países están cambiando de postura para rectificar. Como ejemplo, el de la deriva de la industria alemana que ha pasado de ser líder industrial mundial, a perder competitividad y depender de fuentes de energía emisoras de CO2.

DEFENSA DE LA EXTENSIÓN DE LA VIDA DE LAS CENTRALES COMO SOLUCIÓN SOSTENIBLE

La prolongación de la vida operativa de las centrales nucleares, en línea con las recomendaciones de la Agencia Internacional de la Energía, de la Comisión Europea y de las medidas que están implementando países europeos con estrategias energéticas realistas y sostenibles, permitiría garantizar la sostenibilidad de nuestro sistema energético, en creciente demanda, sin poner en peligro la seguridad del suministro, ni la expansión de infraestructuras renovables. Así como la independencia geoestratégica frente a otros países. Por tanto, habría que asegurar la viabilidad económica de las centrales, haciendo especial hincapié en la excesiva presión fiscal que soportan.

RECONOCIMIENTO DE LA MODERNIZACIÓN Y EXCELENCIA DE LAS CENTRALES NUCLEARES ESPAÑOLAS.

Las centrales nucleares españolas están modernizadas y en condiciones de operar durante muchos años más, 60 e incluso 80 años, en línea con la tendencia internacional. La Asociación Mundial de Operadores Nucleares (WANO) ha reconocido su fiabilidad y seguridad. La central de Almaraz, en particular, ha logrado excelentes resultados de generación, demostrando su eficiencia y relevancia para el sistema energético nacional. Como empresas auxiliares del sector eléctrico, con amplia experiencia internacional, confirmamos que las españolas están entre las mejores del mundo en tecnología, seguridad y eficiencia. Y esta excelencia no solo garantiza la estabilidad del suministro, sino que también refuerza la posición de la industria española en el ámbito global».

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